En la ciudad existen diferentes experiencias de escuelas de formación política, por lo anterior podríamos hablar del tema desde tres ámbitos.

1.       Las organizaciones sociales de Medellín y ONG s

Desde la década de los 80s en la ciudad comenzó a notarse un aumento considerable del número de organizaciones sociales y ONG que tiene presencia en los barrios y centro de la ciudad.

Estas instituciones a lo largo de su historia se han agrupado en diferentes instancias, gremios, asociaciones y redes. Otra cuantas se han subdivido para conformar nuevas organizaciones.

Desde un punto de vista general todas plantean en sus objetos sociales la necesidad de cambiar las actuales condiciones sociales, económicas y políticas que existen en el territorio, ya sea local, departamental o nacional.

La experiencia les ha enseñado que un componente transversal en todas sus acciones debe ser la participación y el ejercicio de la política.

Esta política se entiende desde dos putos de vista, un primer punto de vista es la política electoral, que se entiende como la incidencia que tiene las organizaciones sociales y ONGs en las elecciones que se llevan a cabo en el plano barrial, comunal, de ciudad, departamental y nacional.  

Un segundo punto de vista es la política como la formación de ciudadanos con criterios que le permita ejercer la ciudadanía con responsabilidad, formarlos para que se empoderen en sus territorios en todas las dinámicas sociales existentes, su principal objetivo es aumentar la participación y el empoderamiento ciudadano.

Ambos conceptos están estrechamente ligados porque transversal a ellos se encuentra el poder, la diferencia podría ser la forma de acceder a dicho poder, las organizaciones sociales son tímidas para reconocer que participan directamente en temas electorales, pero promueven y visibilizan sus esfuerzos por formar ciudadanos empoderados y responsables con el entorno.

2.       Los partidos y movimientos políticos

Hasta hace 16 años la ciudad era predominantemente bipartidista, la política era una labor exclusiva de unos cuantos ciudadanos que hacían sus más grandes esfuerzos para que pareciera un asunto para seres sobrenaturales o privilegiados.

En los últimos dos años iniciaron procesos de movilización social con el objetivo especifico de participar en las elecciones y acceder al poder.

Se empezó a conocer el surgimiento de movimientos políticos independientes, grupos asociados a movimientos de izquierda, grupos ONG en alianza con sectores importantes de la industria, movimientos indígenas.

El objetivo y el concepto político expuesto eran claros, movilizar a la ciudadanía para que se interesara por participar en la política electoral y ofrecer una nueva forma de gobernar la ciudad.

3.       La academia, universidades e institutos de formación

Desde la academia el proceso político ha sido más antiguo, más desconocido, más general y su participación en procesos políticos de tipo electoral o de empoderamiento de comunidades se ha limitado a exponer conceptos que sirven de marco teórico.

Cabe reconocer que en los últimos años debido al cambio de modelo institucional de la ciudad y las nuevas tendencias políticas. La academia ha tenido visibles acercamientos con procesos sociales que se lideran directamente en las comunidades.

Por otro lado se han asociado con ONG y movimientos políticos para ofrecer cursos y programas de formación política. Todo ello tratando de evitar generar incidencia sobre algún proceso en particular.